En SomRiure, abordamos una intervención psicológica desde una perspectiva centrada en el trauma y enmarcada en el enfoque bio-psico-social. Esto implica un abordaje integral y sensible al contexto. Nuestro objetivo es la recuperación no solo psicológica, sino también biológica y social, facilitando así una resiliencia a largo plazo y la plena reintegración del paciente en su comunidad.

Este enfoque holístico permite entender y atender mejor las complejas necesidades derivadas del trauma, asegurando un tratamiento eficaz y humanizado.

Este enfoque, propuesto inicialmente por George Engel (1977), sugiere que, para comprender y tratar adecuadamente a la persona, es necesario considerar:

Factores biológicos:

• • Alteraciones neurológicas y endocrinas.
  • Cambios en la actividad cerebral (amígdala, hipocampo, corteza prefrontal).
  • Desregulación del eje hipotálamo-hipófisis-adrenal (HHA).
  • Vulnerabilidad genética.

Factores psicológicos:

• • Estrategias de afrontamiento.
  • Creencias disfuncionales sobre sí mismo, el mundo y el futuro.
  • Síntomas emocionales (ansiedad, depresión, culpa, vergüenza).
  • Trastornos asociados (TEPT, trastornos de ansiedad, depresivos, etc.).

Factores sociales:

• • Apoyo social y familiar disponible.
  • Contexto sociocultural y económico.
  • Redes comunitarias y accesibilidad a servicios de apoyo psicológico.
  • Experiencias previas de violencia, marginalidad o exclusión social.

Al intervenir desde esta perspectiva, nos centramos en:

• Seguridad: Generar un entorno seguro física y emocionalmente.
• Estabilización: Ayudar al paciente a regular emociones, impulsos y sensaciones corporales.
• Psicoeducación: Informar al paciente sobre la naturaleza del trauma, sus efectos, y estrategias para afrontarlo.
• Empoderamiento: Fomentar la autonomía y el control personal.
• Enfoque centrado en fortalezas: Identificar y potenciar recursos personales del paciente.

Para ello nos servimos de distintas técnicas basadas en la evidencia científica, concretamente nos centramos en:

• EMDR (Desensibilización y Reprocesamiento por Movimientos Oculares):
  • Facilita la reprocesación adaptativa del trauma mediante estimulación bilateral.
• Terapia Cognitivo-Conductual (TCC):
  • Trabaja sobre pensamientos disfuncionales.
  • Desensibilización sistemática.